Delfina Delettrez, es realmente joven, sólo tiene 22 años y ya es considerada una promesa dentro del mundo de la joyería. No se si tendrá que ver que pertenece a la familia Fendi, aunque talento no le falta, pero la verdad es que el ascenso y la proyección de su carrera ha sido fulgurante.
Empezó vendiendo sus joyas en Colette, y el éxito fue absoluto. Tanto que sus piezas ya son un imprescindible para cualquier fashionista que pueda pagarlas. Y ademas, desde hace poco, Delfina poseé tienda propia en Roma, cerca de Piazza Navona. Viento en popa, no esta nada mal para una chica de esa edad, todo parece indicar que esto es sólo el punto de partida de una gran carrera
Trabaja con materiales como oro, plata, cristal o cerámica y todas sus piezas desprenden un aire que mezcla el surrealismo con la estética gótica y rock. Sus joyas me recuerdan a las de Dalí; corazones sangrientos, calaveras, animales fantásticos, cruces...
Diseños que se asemejan más a pequeñas esculturas, que a una simple joya.
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